HIPNOSIS CURATIVA
HIPNOSIS CURATIVA
LA HIPNOSIS ES UN CONJUNTO DE REACCIONES FISIOLÓGICAS Y PSICOLÓGICAS QUE SURGEN COMO RESULTADO DE SUGESTIONES VERBALES, DIRECTAS E INDIRECTAS, TÁCTILES, EN ESTADO TRANS ACTIVO O PASIVO. ESTAS REACCIONES CREADAS TEMPORALMENTE POR EL HIPNOTIZADOR PUEDEN VARIAR EN INTENSIDAD Y DURACIÓN.
La medicina se basa en tres factores fundamentales: el bisturí (cirugía), las hierbas (farmacología) y las palabras (psicoterapia). Somos lo que imaginamos, pensamos y decimos. Así, las palabras nos sugestionan (efecto placebo), hasta el punto de influir en nuestros procesos mentales y corporales (analgesia). Durante el trance hipnótico, inducido por el especialista con técnicas específicas (por ejemplo, luz intermitente, péndulo, música, etc.), podemos modificar procesos inconscientes. En el trance hipnótico, la conciencia está completamente preservada y el paciente no puede ser persuadido de hacer nada contrario a su propio código ético y a su voluntad.
¿Qué es la hipnosis?
Quizás ningún otro método psicoterapéutico, y ahora hay cientos de ellos, está conectado a una imagen tan errónea como la atribuida a la hipnosis. Una persona que quiere hacer psicoterapia o someterse a un tratamiento de bioenergía no vive ese terror que tienen algunos pacientes antes de someterse a la primera sesión de hipnosis.
Basta con parar a la gente en la calle y preguntar por la definición de hipnosis para descubrir cómo este término da miedo a muchos, hace reír a otros o se reduce a magia y ilusionismo. En la encuesta realizada en 2017 por el equipo de nuestro centro (ICEAH) hemos obtenido los siguientes resultados: a la pregunta "la hipnosis corresponde al sueño, ¿entonces que se pierde la conciencia?" El 45% de las personas piensa que sí, el 46% no, mientras que el 9% no está seguro.
Cuando se le pregunta "¿es posible hipnotizar al sujeto contra su voluntad?" el 65% de los encuestados afirma que es posible, el 11% no sabe responder y el 24% cree que no es posible. Aunque el 93% de las personas creen saber qué es la hipnosis, como afirman en nuestra encuesta, sus respuestas no son adecuadas.
Pese a estas suposiciones, el 47% de las personas estarían dispuestas a someterse a técnicas hipnóticas con un médico de confianza. La investigación lleva a la conclusión de que es necesario difundir sistemáticamente los conocimientos sobre las técnicas hipnóticas.
Vamos a aclarar
El término "hipnosis" fue acuñado en 1843 por Braid y deriva del griego hypnos, sueño. Este término en sí mismo erróneo ha permanecido en el uso común y médico, aunque ya sabemos que la hipnosis no tiene nada que ver con el sueño, ni siquiera parcialmente. Igualmente erróneo es decirle al paciente al final de la sesión "después de abrir los ojos, estará totalmente despierto", ya que nuestro sujeto está siempre despierto.
UNA DEFINICIÓN DE LA HIPNOSIS:
La hipnosis es la posibilidad de inducir en un sujeto un particular estado psicofísico que permite influir sobre las condiciones psíquicas, somáticas y viscerales del mismo sujeto, por medio de la relación creada entre éstos y el hipnotizador. El trance es una condición en la que aparecen fenómenos de intenso monodeísmo sugestivo ideoplastico capaces de modificar la reactividad orgánica y psíquica. (F. Granone, Trattato di Ipnosi, Utet, Torino 1989, vol. I, pp. 3;88)
La hipnosis es un estado de TRANCE FLOTANTE, pasivo o activo, con CONCIENCIA CONSERVADA, durante el cual recibimos SUGESTIONES verbales o no verbales que se convierten para nosotros en una "REALIDAD'" percibida por nuestros canales sensoriales. El hipnoterapeuta en ningún caso puede actuar contra el código ético del sujeto, que en cualquier momento podrá salir por sí mismo de la relación hipnótica. Los fenómenos hipnóticos nacen gracias a los impulsos transmitidos por el operador: palabras, historias contadas, movimientos táctiles, vibración acústica, luz/oscuridad, olor, etc. Para un buen éxito de la inducción hipnótica son decisivas las expectativas del paciente y la confianza que pone en su médico. Otros factores importantes son: la capacidad de imaginación, la elasticidad mental del sujeto y su capacidad para alcanzar el trance. Además, para el éxito de la comunicación hipnótica es decisiva la calidad de la relación humana (terapeuta-paciente).
Aplastamos los mitos
Al que asiste a una sesión hipnótica de demostración puede parecer que el sujeto que se somete a esta experiencia ejecuta pasivamente las órdenes del operador, cosa que se enfatiza deliberadamente en los programas televisivos. Nos preguntamos si son cómplices o si "el hipnotizador" tiene poderes mágicos. Pero no hay nada mágico; el hipnotizador no tiene facultades particulares y es falso pensar que manipula a los demás contra su voluntad.
Para entender lo que sucede durante la hipnosis, hay que tener en cuenta dos elementos muy importantes, centrales en el proceso hipnótico, es decir: el grado de sugestionabilidad de cada persona y la relación de confianza que se establece entre sujeto y operador.
Prof. Petr Zivny durante la sesión hipnótica.
Comunicación ideomotoria del inconsciente con el índice de la mano derecha.
¿Cómo se hace?
Sugestiones de todo tipo entran en nuestro inconsciente continuamente convirtiéndose en parte de nuestro yo. Esto sucede muy fácilmente cuando estamos relajados, viendo la televisión por ejemplo, o cuando hablamos con una persona en quien confiamos.
¿Qué sucede en estos momentos?
Estamos relajados y confiados, por lo que bajamos nuestras defensas y nuestro sentido crítico se reduce considerablemente.
En estos momentos cada comunicación que nos llega deja una «huella». De la misma manera "nace" la hipnosis, estado de psicoactivación particular estrechamente vinculado al mundo de la sugestión y de la imaginación.
De esta manera se crea un estado de trance, más o menos profundo según los sujetos, que puede ser inducido gracias a la voz, a ruidos monótonos, a la posición del cuerpo, a la fijación con los ojos de un objeto, a una profunda relajación, etc.
Un trance profundo puede ser alcanzado más fácilmente si la persona tiene una buena imaginación, un carácter optimista y una buena concentración; seguramente con sujetos jóvenes o en edad infantil el procedimiento es más fácil.
Además, uno puede entrar en trance incluso sin la presencia del operador (autohipnosis); podemos inducirnos a actitudes y pensamientos positivos, aprendiendo a ser tanto operador como sujeto. La presencia del hipnoterapeuta es insustituible cuando se aborda un camino de psicoterapia y se busca ayuda.
Para evaluar la aptitud personal para las técnicas hipnóticas se recomienda rellenar el siguiente cuestionario diseñado por el prof. Petr Živný.
Nos pondremos en contacto con usted lo antes posible.
CUESTIONARIO DE HIPNOSIS (ITA)
Cuestionario de HYPNOSIS (ENG)
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Por el prof. Petr Živný
DEFINICIÓN DE SALUD MENTAL
La expresión salud mental, según la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se refiere a un estado de bienestar emocional y psicológico en el que el individuo es capaz de explotar sus capacidades cognitivas o emocionales, ejercer su función en la sociedad, responder a las necesidades cotidianas de la vida cotidiana, establecer relaciones satisfactorias y maduras con los demás, participar constructivamente en los cambios del medio ambiente, Adaptarse a las condiciones externas y a los conflictos internos, tener una buena imagen de sí mismo y ser conscientes de sus emociones, afectos y modos relacionales. (2001)